¡Otra vez me entretuve! ¡Mare mía, qué no tengo arreglo!
Como en todos sitios me paraba a jugar con mis vecinillos y vecinillas llevaba ya mucho retraso. Así que, aunque me lo estaba pasando muy bien, me despedí de mis amigos y me fui a donde juegan los hermanos de Manolín al fútbol con sus amigos (Tendrás que esperar al 2 Febrero de 1920 para saber de qué te hablo)