Querido Diario:
Ya vamos camino a Güevéjar.
Antes de salir Papa-Antonio compró el periódico para distraerse durante el viaje y yo entre charla y charla con Loli, voy escribiendo mi diario, así que perdonad por la letra pero se hace difícil mantener una buena caligrafía con tanto meneo.
Como hoy con el viaje, los saludos y el acomodamiento va a ser difícil que me dé tiempo de leer el periódico, le he pedido al abuelo que me vaya contando cosas mientras lee para apuntarlas. Así que este es su resumen:
– Dicen que están estudiando retomar el tema de lo de las casas baratas– pero que él no se cree ya ná.
– El Gobernador Civil sigue haciendo de las suyas, y ahora ha detenido y ha metido en la cárcel a un obrero por colocar una hoja en la esquina del Café Colón diciendo que no se han de suspender las obras del Grupo Escolar del Triunfo- que a ver si le dieran pasaporte pronto porque se está llenado de gloria con tanta sandez (el Sr. Gobernador).
– El Ayuntamiento va a crear una comisión para Fomento del Turismo- que eso está muy bien pero que el mundo acaba de salir de una guerra universal y no está la gente para gastar en muchas gabinas, que ya podrían fomentar obras de urbanismo que le dieran tarea y de comer a todos los obreros que están parados, a la par que viviendas dignas.
– Los labradores se quejan de que les cierren la Acequia Gorda tantos días para hacer las limpias, dejándolos a los pobres sin poder regar durante días- que ya podrían hacerlo varias veces al año por menos tiempo para que no sean tantos días seguidos sin riego, que poco hay para comer pero si encima no se riega que “¡Vaya, con las cabezas pensantes que tenemos!”
– En Montefrío han robado en un cortijo dos caballerías abriendo la puerta con un taladro- que no hay más que canallas por todos lados.
Y por último:
-No sufras, chatilla, que hoy no hay entrega del Conde de Montecristo- con su guiño correspondiente al decírmelo.
Ya no escribo más por hoy que no veas qué difícil es meter el plumín en el tintero que me está sujetando todo este rato la pobre Loli para que no se derrame.
Lo de esta chiquilla no tiene precio. ¡Qué bonica es siempre conmigo! Desde hoy ya la he nombrado mi secretaria personal.