Querido Diario:
Bueno, bueno, bueno, con lo del conflicto del gas. No sabe ya una qué pensar.
Resulta que los de Lebón se reúnen con el Gobernador Civil y dicen que tiene que utilizar el material que están utilizando porque no les queda carbón de hulla y que con lo que tienen no van a durar muchos días.
El Gobernador los pone en contacto con el empresario de la Azucarera “La Vega”, el Sr. Mancebo, que se ofrece gustoso a requerimiento del Alcalde, a dejarles las 200 toneladas de carbón de hulla que dicen necesitan para continuar con el servicio de alumbrado, con la única condición de que se lo devuelvan o bien en la misma cantidad en el que él lo adelanta o bien pagándole el precio de lo que a él le ha costado.
Creo yo que es una buena solución y una opción más que justa ¿no? Pues, no. No le parece bien a la compañía del alumbrado.
¡Esto ya es de chufla, vamos!
De aquí a ná va a parecer que estamos tós viviendo en la Cueva de la Macaca.
La Cueva de la Macaca fue una leyenda/cuento muy popular en el barrio y tanta fue su popularidad que aún hoy en día se sigue utilizando entre los más mayores y herederos culturales, la expresión “esto parece la Cueva de la Macaca” para describir lugares sucios, desordenados u oscuros. Puedes conocer el cuento a través de los textos de Afán de Ribera narrados por una servidora en este enlace: http://www.diarioalbayzinera.com/index.php/2020/04/19/la-cueva-de-la-macaca/