Querido Diario:
Ayer llegó a Granada el ex reciente Ministro de Obras Públicas y Bellas artes, D. Natalio Rivas, que viene a la boda de D. Antonio Soler.
Cuando llegó el tren ya estaban esperándolo multitud de gente para recibirlo y esa tarde, su estancia en el Hotel Washington de la Alhambra, se convirtió en una Meca en la que acudieron en peregrinación innumerables caravanas de granaínos para mostrarle su afecto y gratitud.
Cuentan que al salir de la novillada a la que fue invitado por las fiestas de San Juan, estando paseando con su amigo y escritor (colaborador del El Defensor de Granada) D. José Díaz Martín, D. Natalio, observó curioso el alfiler de corbata que portaba D. José. Un alfiler que, al parecer, lucían ya sus antepasados y que representaba una espada con empuñadura de taza, hecha a cincel, en trabajo de filigrana cordobesa y con adornos de diamantes y zafiros:
-No es costumbre hoy llevar en la cintura el emblema de la caballerosidad por eso lo llevo en la corbata- Dijo D. José.
Se lo quitó y se lo ofreció diciendo:
-Ha sido usted el único amigo del que nunca he dejado de recibir afectos (…) yo le regalo a usted éste, que espero conserven sus hijos ya que yo no los tengo, como recuerdo de la gran amistad que nos une.
A mí plim estas cosas pero la verdad es que D. Natalio es muy querido y valorado por nuestros paisanos, por cómo defiende su Graná y su Alpujarras en las cortes. Las cosas como son.
Pero, bueno, eso fue ayer. Para mañana, aprovechando su presencia, en el Centro Artístico le han preparado para las nueve de la tarde un banquete en su honor, ya que no pudo celebrarse en su anterior visita y se quedaron todas las ganas de agasajarlo.
Para esto, han preparado los amplios salones del Centro Artístico, cuya mesa presidencial ocuparán el vocal más antiguo de esta sociedad, Sr. Vilchez, el Alcalde, D. Antonio Ortega Molina y, en el centro de la mesa, D. Natalio.
El menú será elaborado y servido por el Gran Suizo.
¡Más postín no cabe, chiquillo!