Querido Diario:
Como hoy no hay periódico vamos a repasar y revisar las pesquisas que se van haciendo sobre el atentado del otro día. A ver si sacamos alguna pista nueva como el Sherlock Holmes ese.
Por cierto, que tengo ganas de leerme alguna de sus novelas. O mejor, leérsela a las niñas del taller y disfrutar viéndoles la cara de suspense, intriga y dolor de barriga.
A lo que íbamos, repasemos:
14 de Octubre:
Prestó declaración la tabernera Encarnación “La Cateta”, que dice haber visto la bomba momentos antes de que estallase, que le pareció el farol de un sereno y que estaba colocada como a media vara del suelo. Asegurando que no estaba en el marperlán de la reja donde hizo explosión.
El Sr. López Aznar, el dueño del estanco de la plaza del Carmen, y su hijo que viven en la mismitica calle Ángel, han declarado que llegaron a casa momentos antes de la detonación. El caso es que antes de entrar, decidió echar un chorrillo en la calle, y mientras evacuaba vieron a un par de hombres situados en la esquina de la calle Verónica de la Magdalena, una trasversal a la calle Ángel. No le dieron importancia y entraron a su casa para cenar, cuando estaban en ello fue cuando estalló la bomba.
A lo que añado que el día anterior unos vecinos declararon que vieron esa noche a tres desconocidos en esa misma esquina y que echaron a correr, dos hacia Recogidas y uno hacia la calle de la Tablas, momentos antes de la explosión.
(¡A ver si nos aclaramos, chiquillo! ¿Eran dos o tres? Mal vamos. En fin, sigamos…)
Designan como peritos para examinar la zona y emitir un informe: al albañil D.Francisco Márquez, al cerrajero D. Manuel Guevara y al carpintero D. José Ferrer.
15 de Octubre:
Declara el Comisario de Policía D. Jerónimo Martos, que al parecer han estado haciendo sus averiguaciones, realizado registros domiciliarios y demás consideraciones, que no se pueden contar por secreto de sumario.
(¡Pues vaya gabinas!)
Y declaran los peritos pero no aportan información más que una valoración de los daños en 95 pesetas.
(Anda que… ¡Así no se puede trabajar!)
Menos mal que el juez, Sr. Cánovas, estuvo vivo con sus interesantes preguntas respecto a la carga que podría tener la bomba, porque parece ser que por la manera del corte hecho en la madera donde explotó, y por la naturaleza y forma de otros daños causados, pudiera tratarse de dinamita y no de pólvora.
Nada supieron decirle los peritos.
(Normal. ¿Qué sabrán ellos de eso? ¡Llame a un barrenero, hombre de Dios! Si es que… ¡Así no hay manera! Ah, que después dice en el artículo que han mandado a llamar al Jefe de Minas para que emita un informe. Vale, entonces me callo…)
El Sport del Rumoreo: Dicen, comentan, susurran voces ajenas a lo oficial, que la policía tiene ya una pista muy importante para dar con el autor o autores del atentado, pero que lo llevan en el más estricto secreto para que no se les adelante nadie con el chivateo y se les escapen.
(Menester que sea de verdad una pista y no un pisto manchego…)
Para hoy estaban citados el sereno de la calle, un dependiente del establecimiento que tiene Sr. Nieva en la calle Recogidas, y los contratistas que habían recibido el anónimo ese de LA MANO CASTIGADORA. Bueno, al Sr. Nieva le van a tomar declaración en su casa porque está malico hace tiempo y no le es posible trasladarse al juzgao.
En resumen:
¿Se puso o no la bomba en la ventana?
¿Eran dos o tres individuos?
¿La carga era de dinamita o de pólvora?
¿De dónde la sacaron?
¿La bomba iba realmente dirigida a otra víctima y se equivocaron?
O lo que es peor ¿ha llegado el Terrorismo a Granada para instalarse como en Barcelona u Orense?
Habrá que esperar a tener más información, porque con lo que hay no me aclaro y se me hace difícil hasta poder afirmar eso de que el culpable es el Mayordomo, como al final siempre pasa en todas las novelas.
No me arriesgo. Habrá que seguir investigando…
Antonio Miguel 18 octubre 2020
¡Mare mía que follon!. A ver si nuestra reportera hace mas averiguaciones y nos enteramos sobre todo del porqué que hallan puesto un bomba en la calle Ángel y sobre todo para quien iba, sabiendo el destinatario podremos saber por dónde van los tiros, bueno quiero decir las bombas. Enganchaico me tiene este asunto y preocupado.
MARGARITA MARIN 19 octubre 2020 — Autor de la entrada
jejeje Así estamos todos, con el alma en vilo…